
Sin duda, ha sido un año bastante movidito para la que fuera ‘reina del pop adolescente’. Primero tiene problemas con el alcohol, las drogas y como se puede comprobar en la foto, con el sobrepeso. La hemos visto más en el Mc Donals y en el Starbucks que subida al escenario y las fiestas con Paris Hilton también han sido frecuentes.
Por todos estos motivos, y por el desastre de vida que lleva le han quitado a sus pequeños retoños. Tan preocupada está Britney que para desahogar sus penas a pensado volver a casarse, por tercera vez.
Si en lo personal parece que está arreglando sus problemas, en lo profesional Spears quiere volver a recuperar el trono de reina del pop en el que estuvo años sentada y del que ella misma se bajó.
Para volver de su destierro, intenta de todo. Y lo hizo como mejor sabe, o como sabía, cantando. Fue en la gala de los MtV Music Awards en la que le criticaron más que aplaudieron. Con un baile sin gracia, unos kilos demás y haciendo un playback penoso, Britney presentó su última canción Gimme More. El caso es que a pesar de todas las críticas está vendiendo más discos que nunca.
Pero Britney quiere volver a recuperar el respeto y admiración de sus fans y volver a tener a sus hijos, por eso no ha encontrado mejor forma que diseñar ropa de niños.
La cantante se reunió con el diseñador Christian Audigier (en inglés) en las oficinas de las tiendas de ropa Ed Hardy, para empezar a producir una nueva línea de vestidos para niños con el toque personal de la artista. Spears solicitó al antiguo diseñador de la empresa de moda Von Dutch porque dice que le ama y respeta como diseñador. Britney Spears cada vez nos sorprende más
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